Mente y emociones

Cuerpo, mente y emociones

La mente y el cuerpo están conectados a través del sistema nervioso y el sistema endocrino. Lo que piensas y crees puede afectar tu cuerpo físicamente. Por otro lado, tus pensamientos y creencias influyen en cómo experimentas tus emociones. Por ejemplo: Si piensas que un problema no tiene solución, te sentirás más ansioso o triste. Pero si interpretas una situación de manera positiva, sentirás más calma y confianza.

Las emociones que resultan a causa de un pensamiento se sienten en el cuerpo. La felicidad puede dar una sensación de ligereza y bienestar.  Por otro lado, la ansiedad puede por ejemplo manifestarse con taquicardia, sudoración o tensión en el pecho. La tristeza puede hacer que te sientas físicamente cansado o sin energía. 

El mundo en el que vivimos, está lleno de exigencias y retos. Desde pequeños, nos enseñan a encajar, a funcionar y a integrarnos en la sociedad. Pero a veces, no aprendemos lo suficiente cómo al mismo tiempo gestionar nuestro propio bienestar respetando nuestra personalidad y nuestras capacidades. 

¿Cuántas veces nos encontramos tropezando con el mismo problema, solo que aparece disfrazado de distintas formas? Y no solo es uno, sino varios, que juntos desencadenan una tormenta de emociones que nos alejan de lo que realmente deseamos: Y es tener tranquilidad, relajación, alegría, equilibrio, motivación, satisfacción y buen humor.

La mente es una herramienta poderosa. Con nuestra actitud, podemos complicarnos la vida... o aprender a hacerla más sencilla.

Hoy, más que nunca, los tiempos que vivimos demandan de nosotros una gran estabilidad mental y emocional. Aprender a gestionarla no solo nos ayuda a superar los retos diarios, sino también a disfrutar más plenamente de la vida.

Las técnicas que ofrezco están diseñadas para ayudarte a gestionar mejor mente y emociones y permiten a:

. incrementar la motivación

. mejorar la atención y la concentración

. aumentar la confianza en uno mismo y el coraje

. recuperar más rápido la paz interior en situaciones de estrés

. manejar mejor situaciones desafiantes y 

. reaccionar con más calma 

. fortalecer el sistema inmunológico

. mejorar la circulación sanguínea

. reducir los miedos y otros estados emocionales negativos, como irritabilidad, impaciencia etc.

. equilibrar el sistema hormonal


También está indicado para los niños, si por ejemplo:

. son intranquilos y no pueden estar quietos

. tienen dificultades de concentrarse

. no pueden controlar su comportamiento

. tienen dificultades en el aprendizaje

. sufren estrés en el cole

. tienen dificultades para dormir

. son desmotivados

. con poca energía

. nerviosos o sobreexitados



El tratamiento puede incluir:

  • reflexología facial, podal y de la mano
  • el entrenamiento autógeno 
  • meditación mindfulness
  • el EFT (técnica de liberación emocional)
  • afirmaciones
  • visualizaciones
  • Shiatsu/digitopuntura
  • Flores de Bach